
La psoriasis es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en el mundo.1
Puede manifestarse en cualquier parte del cuerpo, incluso en las zonas más íntimas.2
La psoriasis genital sigue siendo una de las formas más invisibles y silenciadas: el estigma y el miedo al rechazo hacen que muchos pacientes callen su experiencia.2
Por ello nace Sin Revelar, una exposición fotográfica que busca dar luz a aquello que el tabú no nos deja ver.
En España, la prevalencia de la psoriasis se estima en un 2,3%, afectando a más de 1 millón de personas.3
En su presentación en localizaciones especiales, la psoriasis puede limitarse a áreas específicas del cuerpo: genital, inversa, cuero cabelludo y ungueal.4
En zonas como los pliegues cutáneos y la región genital, el microambiente particular, mayor humedad y temperatura, influye en las respuestas inmunitarias locales.
Esto reduce la presencia de placas tradicionales con escamas, generando lesiones más suaves, rojas y eritematosas, debido a niveles más altos de hidratación cutánea.4
Es la región más comúnmente afectada dentro de las localizaciones especiales, involucrada en aproximadamente el 80% de los casos de psoriasis.5
La prevalencia varía entre el 10% y el 82% en pacientes con psoriasis.6
Hasta el 63% de los pacientes adultos con psoriasis presentan lesiones psoriásicas en el área genital a lo largo de su vida.7
Prevalencia variable, entre 21-30%; suele estar infraestimada por confusión clínica con otras enfermedades intertriginosas.89
Calidad de vida (QoL)
Las lesiones en zonas genitales, pliegues, uñas o cuero cabelludo tienen un impacto desproporcionado en la calidad de vida comparado con otras localizaciones.
Afectan la imagen corporal, las relaciones íntimas, la autoestima y la capacidad laboral y social. Las herramientas más usadas para medir este impacto son el DLQI (Dermatology Life Quality Index) y escalas específicas como la Genital Psoriasis Symptoms Scale (GPSS).710
La psoriasis genital se asocia con problemas en la función sexual, mayor angustia y aislamiento. Varios estudios muestran un descenso significativo en la satisfacción sexual y un incremento en la disfunción en pacientes con psoriasis genital.7
La psoriasis ungueal puede causar dolor y limitación funcional (por ejemplo, en el agarre o manipulación). Además, se considera un factor pronóstico de comorbilidades como la artritis psoriásica, dada su asociación con la afectación ungueal.6
La psoriasis en zonas especiales está frecuentemente infradiagnosticada.8
Muchos pacientes no mencionan la afectación genital o íntima durante la consulta.8
Escalas como el PASI evalúan la extensión cutánea, pero no valoran adecuadamente lesiones en áreas pequeñas pero muy sintomáticas.8
En pliegues (intertrigo, candidiasis, dermatitis) y en cuero cabelludo (dermatitis seborreica o caspa) puede retrasar el diagnóstico.9
Es fundamental valorar la gravedad de la psoriasis considerando las localizaciones especiales, y no solo el BSA (Body-Surface Area).11
Cuando las placas son muy recurrentes, extensas o afectan zonas visibles o íntimas (cara, genitales, cuero cabelludo), también se considera psoriasis grave.11
BSA: Body-Surface Area
DLQI: Dermatology Life Quality Index
GPSS: Genital Psoriasis Symptoms Scale
NMA: Network Meta-Analysis












